El ‘telón de acero’ de Trump golpea duro a España, Arcelormittal y Acerinox
La decisión de imponer un arancel del 25% al metal extranjero podría dejar a España sin 324 millones de euros.
Donald Trump, ha puesto en vilo al sector metalúrgico español. Y particularmente al acerero. El presidente de Estados Unidos firmó el famoso ‘impuestazo’ de hasta el 25% en las importaciones de acero y aluminio.
Pero el ‘impuestazo’ con el que Trump quiere blindarse también tiene sus consecuencias en España. Nuestro país cuenta con unas explotaciones acereras sobresalientes y la producción de acero bruto en España alcanzó los 14,4 millones de toneladas en 2017. Esta cifra supone un aumento del 5,7% respecto al 2017, lo que se traduce en buena marcha industria siderúrgica de la mano del mercado nacional y de un entorno internacional positivo, en un ciclo ascendente de las materias primas, según datos de la patronal Unesid (Unión de Empresas Siderúrgicas).
El proteccionismo de Trump supondría un fuerte revés a varias empresas siderúrgicas en España y a sus trabajadores. Según datos de la patronal de la siderurgia, existen cerca de 20.000 personas trabajando en este sector de forma directa y en la actualidad hay más de 70 plantas que se dedican al tratamiento del acero.
El negocio de las empresas siderúrgicas españolas en Estados Unidos representa el 6% de las exportaciones en la Unión Europa. El año pasado se enviaron hasta 377.169 toneladas, lo que significó una facturación total de 325 millones de euros, según datos de la Unesid. El presidente de la corporación, Andrés Barceló, indica a EL ESPAÑOL que, con la medida adoptada por Trump, “es impensable que se pueda seguir exportando a esta región”, debido a que “los márgenes se deberían ajustar tanto que sería ruinoso”. A su vez indica de “barbaridad” la ocurrencia del presidente estadounidense porque estas acciones podrían desencadenar una “guerra comercial innecesaria”.
Sobre las medidas que pueden tomarse, el presidente de Unised prefiere guardar cautela. “Confiamos en que la UE lleve a EEUU a la OMC para conseguir desmontar legalmente este disparate y que, en paralelo, se pongan medidas de salvaguardia que impidan una avalancha indiscriminada de importaciones en Europa”, resalta.